PANAMÁ. 1 DE ABRIL DE 2021.      El Jueves Santo, el Obispo de la Diócesis de Chitré, realizó la Misa Crismal, junto al clero, religiosas y seminaristas. Fue un momento de reflexión en estos momentos de pandemia, donde todos los presbíteros se congregaron al Santo Crisma, renovando sus votos y promesas sacerdotales, don que Dios les ha regalado.

 

Monseñor Rafael Valdivieso Miranda, expresó, pidámosle al Señor que al consagrar estos aceites que será un signo que alivia, que consagra, que nos va preparando en el crecimiento en la vida de fe cristiana, que el Señor renueve en nosotros el don que hemos recibido para que demos testimonio de lo que Él nos ha consagrado, para anunciar a Jesucristo con toda nuestra vida.

 

Es un día muy especial un momento en que el Señor nos hace sentir, avivar, tocar  en lo más profundo este don tan maravilloso que el Señor nos ha dado, dijo.

 

En esta Eucaristía el Obispo de Chitré, junto al clero presbiteral bendijo el ‘Oleo de los enfermos’ que llegará como sello consolador de todas sus dolencias; también el ‘Aceite de los Catecúmenos’, utilizado para ungir a quienes se preparan para el bautismo y finalmente consagró el ‘Santo Crisma’ que se utiliza como sello espiritual en las ordenaciones sacerdotales, confirmaciones, bautizos, consagración de altares e Iglesias.

 

Durante la homilía les dijo, renovar los votos, es renovar esas promesas ese momento de la consagración, es volver a revivir como Jesús, esos tesoros tan grandes de la vida humana que nos ha confiado y que tiene que causar ese asombro en la comunidad para reavivar en medio de tanta dificultades esa esperanza, de que a pesar de las pruebas tan grandes como lo hemos vivido este año, Él es nuestra fuerza.

 

“Hermanos en el sacerdocio ministerial, quiero felicitarles, expresarles mi admiración, mi gratitud siempre y mis oraciones  por ese don que el Señor les ha confiado y que a través de este Evangelio que escuchamos cada año, nos muestra esa predicación tan corta de Jesús pero que implica toda la misión que el Padre les ha confiado”, manifestó Monseñor Valdivieso Miranda.

 

También le recordó a los presbíteros, el renovar este don que el Señor  nos ha dado, es para ser instrumentos de su Palabra, de la Eucaristía, de la Misericordia a tantas personas que el pone en nuestros caminar; de  hacer presente en la vida de tantos hermanos el alivio, el consuelo, la paz, la fortaleza, el ánimo, la luz que esa Palabra de Dios va transmitiendo a través de personas que se han consagrado.

 

Somos humanos, también experimentamos cansancio, desilusiones, tristezas, angustias, caemos en esas situaciones que se nos va apagando esa llama y Dios nos da este regalo de que cada año podamos reflexionar de ese don que hemos recibido, el Obispo de Chitré pide a la comunidad cristiana su oración, comprensión y apoyo a los sacerdotes.

 

La Misa Crismal este año siguiendo las medidas de bioseguridad se realizó con la participación del clero, representantes de la vida consagrada  y seminaristas del seminario Mayor Santa María la Antigua de La Villa de Los Santos.