PANAMÁ. 4 DE DICIEMBRE DE 2020.  Fieles del pueblo de Las Minas en la Diócesis de Chitré, en la fiesta de su Santa Patrona Santa Bárbara, el 4 de diciembre, celebraron sus 220 años de vida parroquial, con una Eucaristía presidida por Monseñor Rafael Valdivieso Miranda, siguiendo las medidas de bioseguirdad y el aforo del templo; también con un recorrido con la imagen peregrina por las principales calles del distrito cabecera.

 

Monseñor Rafael Valdivieso Miranda, al inicial la misa señaló, “celebramos con alegría esta festividad de Santa Bárbara patrona de esta comunidad de Las Minas, nos encomendamos a ella para que interceda por nosotros, por todos los pueblos de esta parroquia, en medio de esta situación tan difícil; para que el Señor siga sanando nuestro interior de todo miedo, toda angustia, desesperación, nos de siempre esa salud de la fe, la confianza, del optimismo de ese saber  que confiados en el Señor podemos enfrentar cualquiera dificultad así como lo hizo Santa Bárbara, con la fortaleza y la mirada puesta en Dios.

 

Reafirmó,  en está festividad de Santa Bárbara Virgen y mártir se nos recuerdan esos aspectos tan importantes, dentro de la vida como son la castidad.

 

“El que ama la misma fuerza del amor, lo lleva a uno a abrazar los sacrificios, las dificultades, las pruebas, las exigencias y esas  responsabilidades por las personas que uno ama tanto”, dijo Monseñor Valdivieso, indicando, esa experiencia del amor nos hace entender todo el significado que tiene la cruz en la vida cristiana.

 

Esas cosas que aquella jovencita sintiendo la tortura que le suministraba su propio padre, debió tener momentos de tristeza, momentos de dolor y de cuestionarse ¿por qué tuve un papá así? ¿por qué una persona que me causa tanto daño, es mi padre? Manifestó Monseñor Valdivieso, que un padre  está llamado a dar alegría, a fortalecer la identidad, la personalidad, la afectividad de sus hijos  y la espiritualidad pero  muchas veces lo que hace es torturar.

 

El Obispo de Chitré, indicó que esta jovencita experimento lo que mucha gente sigue experimentando en el camino de la vida, pero a diferencia esta joven en medio de esa dificultad tenia esa esperanza, con su mirada puesta en Dios que la hizo perseverar, ser fiel hasta lo ultimo.

 

Santa Bárbara nos invita y nos enseña a tener siempre la mirada puesta en Dios en ese padre que nos ama, expresó Monseñor Rafael Valdivieso Miranda.

 

El Padre Marcos Solís, al concluir la Eucaristía manifestó, “una fiesta patronal que no tenga frutos espirituales no funciona”, “lo importante es que esta parroquia se transforme espiritualmente”.

Nos llenamos de mucho gozo porque celebramos 220 años de vida parroquial, una historia de fe, un itinerario hacia Jerusalén, un trayecto de fe en Jesucristo, destacó.

 

El próximo año también vamos a estar de fiesta , celebramos 100 años de la llegada de la Imagen de Santa Bárbara, ha este sitio.  Encontramos en Santa Bárbara un ejemplo digno a seguir, de fidelidad y alegría, recalcó el sacerdote Marcos Solís.