Una nueva etapa vive la Iglesia en Panamá

Una nueva etapa vive la Iglesia en Panamá

El Arzobispo de Panamá, José Domingo Ulloa Mendieta, aseguró que “los obispos panameños estamos comprometidos en asumir esta nueva etapa histórica de la Iglesia con mucho entusiasmo y valentía -guiados por el Espíritu Santo- para hacer las transformaciones y conversiones que se requieren en estos nuevos tiempos”.

Nuestro reto futuro es que vivimos una experiencia de comunión eclesial, que nos anima a continuar siendo una Iglesia en salida, sin miedo a encontrarse con aquellos que son distintos pero no distantes; a buscar a los alejados y excluidos de la sociedad, destacó monseñor Ulloa.

Nos corresponde a todos los que tenemos un liderazgo, proveerle los espacios necesarios para que la juventud pueda formarse, demandar y exigirnos los espacios para asumir su plena ciudadanía, especialmente cuando nos preparamos para los comicios electorales, dijo el Arzobispo metropolitano.

Tras indicar que: “Lo que vivimos, aprendimos, compartimos y gozamos durante los días de la JMJ, tiene que continuar presente en nuestra vida personal, familiar y comunitaria”, recordó que en la Catedral Basílica se han realizado “eventos que han marcado hitos importantísimos en la vida de la Iglesia en Panamá y de la nación panameña, como la consagración del altar de esta Basílica Catedral realizada por el  Papa Francisco, el pasado 26 de enero, un hecho único en este pequeño país”.

Reconocimiento a Gago y a miembros del COL JMJ

También en un acto de reconocimiento advirtió el arzobispo Ulloa que al hablar de la Catedral, es imposible no pensar inmediatamente en nuestro hermano Ricardo Gago, quien unido a los miembros del Comité de Amigos de Iglesias del Casco Antiguo, le entregó al pueblo panameño este hermoso templo remodelado, donde podemos celebrar la fe dignamente como se merece el Señor y nuestro país.

Además de resaltar los dones del señor Gago, indicó que también hizo posible que todos los panameños se sumaran a aportar al proyecto de la  Catedral, les dio sentido de pertenencia, desde los más sencillos y humildes hasta los que tienen mayores recursos. La oportunidad fue propicia para que monseñor Ulloa entregará una bandeja de plata y un pergamino en que consta la gratitud de la Iglesia por todo el servicio del señor Gago.

De manera especial, el Arzobispo Ulloa agradeció al pueblo panameño, por abrir su corazón y las puertas de su hogar, para compartir su solidaridad y fraternidad con los miles de peregrinos que celebraron la fiesta de la JMJ. Una gratitud igualmente a los miembros del Comité Organizador Local de este evento juvenil, por su entrega generosa y hacer posible realidad este sueño.

Las palabras del Arzobispo de Metropolitano, se dieron en la homilía durante la Eucaristía de clausura de la asamblea de la Conferencia Episcopal Panameña Nº 209, que se realizó en la Catedral Basílica Santa María la Antigua, el 28 de febrero, donde se contó con la presencia de todos los obispos de Panamá y el Nuncio Apostólico.