Francisco reza por la embarazadas y advierte El riesgo de “viralizar” la fe

Francisco reza por la embarazadas y advierte El riesgo de “viralizar” la fe

PANAMÁ. 17 DE ABRIL DE 2020.   El Santo Padre, pidió por las mujeres embarazadas en este tiempo de incertidumbre causada por la pandemia del coronavirus; en la misa que realizó en la Capilla de Santa Marta.

“Quisiera que hoy rezáramos por las mujeres que están embarazadas, mujeres embarazadas que se convertirán en madres y están inquietas, preocupadas. Una pregunta: ‘¿En qué mundo vivirá mi hijo?’. Recemos por ellas, para que el Señor les dé el coraje de seguir adelante con estos hijos con la confianza de que ciertamente será un mundo diferente, pero siempre será un mundo que el Señor amará tanto”.

El Papa Francisco, en su homilía habla del riesgo de una fe gnóstica, sin comunidad y sin contacto humano real, vivida sólo a través de transmisiones en directo que “viralizan” los sacramentos.

Nosotros los cristianos, explicó, debemos crecer en esta familiaridad, que es personal pero comunitaria. Una familiaridad sin comunidad, sin Iglesia, sin los Sacramentos, es peligrosa, puede convertirse en una familiaridad gnóstica, separada del pueblo de Dios.

Antes de Pascua, cuando salió la noticia de que celebraría la Pascua en San Pedro vacía, un Obispo me escribió – un buen Obispo: bueno – y me regañó. «Pero cómo es que San Pedro es tan grande, ¿por qué no pone 30 personas por lo menos, para que se pueda ver a la gente? No habrá peligro…». Pensé: «Pero, ¿qué tiene en la cabeza, para decirme esto?». No lo entendí, en el momento. Pero como es un buen Obispo, muy cercano a la gente, querrá decirme algo.

Entonces lo entendí. Me dijo: «Ten cuidado de no viralizar la Iglesia, de no viralizar los Sacramentos, de no viralizar al Pueblo de Dios». La Iglesia, los Sacramentos, el Pueblo de Dios son concretos. Es cierto que en este momento debemos hacer esta familiaridad con el Señor de esta manera, pero para salir del túnel, no para quedarse allí…

Que el Señor nos enseñe esta intimidad con Él, esta familiaridad con Él pero en la Iglesia, con los Sacramentos, con el pueblo fiel de Dios.