Diócesis de Santiago se regocija por el nuevo Diácono Eusebio Bermúdez

Diócesis de Santiago se regocija por el nuevo Diácono Eusebio Bermúdez

PANAMÁ. 22 DE MAYO DE 2021.   Feligreses de la Diócesis de Santiago, recibieron con mucha gratitud y gozo, por el Sacramento del Orden del Diaconado que recibió uno de los hijos de esta tierra, el Seminarista Eusebio Bermúdez, de manos de Monseñor Audilio Aguilar Aguilar,  el sábado 22 de mayo en la Catedral Santiago Apóstol.

 

Monseñor Audilio Aguilar Aguilar, en su homilía expresó, “nos congregamos en esta Iglesia Catedral para conferir el Ministerio de Diaconado a un hijo de esta Iglesia diocesana, el Seminarista Eusebio Bermúdez Tejeira, saludar de manera especial a sus padres Eusebio Bermúdez y Danelys Tejeira C., a quienes agradecemos la  entrega generosa de su hijo al servicio de la Iglesia, gracias por esta donación y por ser para Eusebio el apoyo incansable en los momentos difíciles y por mostrarle siempre el camino correcto”.

 

Dijo además, “que al ser Ordenado Diácono el Señor te da la gran misión de anunciar el Evangelio, pero esta misión debes ejercerla con autoridad, solo así podrás proclamar libremente”.

 

El Señor te manda a construir y a edificar, ten siempre presente que por diversos que sea el lugar o diferente que sea determinada población, allí el Señor te envía a construir  a edificar el Reino de Dios, recalcándole, “recuerda Eusebio que jamás estarás solo, el Señor siempre te acompañará”.

 

Recibir el diaconado en estas circunstancias y sobre todo donde se nos pide que seamos servidores de los demás, parece ser un lenguaje extraño para el mundo, indicó Mons. Aguilar A..

 

En su exhortación a Eusebio, le indicó, te ordenas diácono para ser trabajador del Reino, en buscar a los que están cansados y agobiados, para enseñarles el camino de la felicidad, para ayudar a los hombres de hoy a lidiar con sus sufrimientos y fatigas, es decir debes darles esperanza, enseñarles la razón para seguir viviendo.

 

Estamos alegres porque un joven de nuestra tierra concretiza el llamado que el Señor le hizo un día, y hoy por la imposición de las manos del Obispo recibirá la gracia de ser llamado oficialmente al servicio de su Iglesia.   Que María Santisima nuestra Madre bajo la advocación de la medalla Milagrosa coopatrona de nuestra Diócesis te proteja y e ayude con su intercesión a cumplir las promesas que hoy haces en la presentación de este ministerio, fueron las palabras del Obispo de Santiago.

 

Rito de Ordenación

Postrado de rodillas el seminarista Eusebio Bermúdez, prometió obediencia y respeto a la Iglesia, al Obispo y a sus sucesores; con la oración de las letanías culminó los ritos preparatorios con una oración. Luego con la imposición de las manos sobre la cabeza, el Espíritu Santo se hace presente en Eusebio, junto a las plegarias de ordenación consagratoria hechas por el Obispo, fue consagrado Diácono, convirtiéndose en servidor de la comunidad cristiana, momento central  de la ordenación.   Seguido de la imposición de la estola y la dalmática, y finalmente recibió el Libro de los Evangelios con el que concluyó el rito de ordenación.

 

Palabras del nuevo Diácono

 

El Seminarista Eusebio Bermúdez, al concluir la ceremonia de ordenación manifestó,  “mi corazón se siete henchido de emoción y gratitud para con Dios en primer lugar, que de la nada me ha traído a la existencia, ha fijado su mirada en mí, en mi finitud como criatura suya, pero la que al mismo tiempo reviste con su gracia”.

 

Misión que asumo con total disposición en plena libertad viril y proclamar hasta los últimos días de mi vida, dijo.

 

Agradeció de modo especial a sus padre por decir si al proyecto de Dios, por permitirle crecer como persona tanto humana como espiritualmente, expresó el joven Bermúdez, “gracias por ser pieza fundamental en mi vida, y en mi proceso vocacional y por ser testimonio para mi, me siento orgulloso por tenerlos como padres. Gracias también de manera especial a Mons. Audilio Aguilar, Aguilar, obispo de nuestra diócesis”.

 

Para el joven Bermúdez, fue de gran alegría el hecho de que sus nuevos hermanos coreanos, fueron ordenados diáconos a la misma hora, en el Seminario Mayor San José de Panamá, a quienes extendió sus felicitaciones.