1 de mayo. Preocupación por los trabajadores desde la mirada de los Papas

1 de mayo. Preocupación por los trabajadores desde la mirada de los Papas

PANAMÁ. 1 DE MAYO DE 2020.   Un primero de mayo diferente, encerrados en casa para evitar que se propague la pandemia del Covid19. Este día, la Iglesia celebra a San José Obrero. El 1 de mayo en muchos países se celebra el Día Internacional de los Trabajadores.

El Papa Francisco encomienda a la Misericordia de Dios a las personas afectadas por el desempleo a casa de la actual pandemia. ¡Que el Señor sea la Providencia de todos los necesitados y nos anime a ayudarlos!”.

El Día del Trabajador,  una celebración vista desde la mirada y la voz de los Papas a lo largo de la historia.

El Papa Pablo VI en su discurso a los representantes del Movimiento Mundial de Trabajadores Cristianos en 1973, expresó “La Iglesia no puede ser la Iglesia de Jesucristo sin la presencia y participación del mundo laboral”.

En la Carta Encíclica Pacem In Terris, Juan XXIII escribió “Ha de retribuirse al trabajador con un salario establecido conforme a las normas de la justicia y que le permita, tanto a él como a su familia, mantener un género de vida adecuado a la dignidad del hombre”·

Juan XXIII también expresó “El hombre tiene derecho natural a que se le facilite la posibilidad de trabajar pero estos derechos económicos están ciertamente unidos al de exigir condiciones de trabajo que no comprometen la realidad moral”.

“Con su trabajo el hombre ha de procurarse el pan cotidiano y contribuir al continuo progreso de las ciencias y la técnica”, señaló el Papa San Juan Pablo II en el año 1981.

“Con el sudor de su frente, o sea no sólo con el esfuerzo y la fatiga personales, sino también en medio de tantas tensiones, conflictos y crisis que en relación con la realidad del trabajo, trastocan la vida de cada sociedad y aun de toda la humanidad”, expresó San Juan Pablo II.

El Papa Benedicto XVI en el año 2006 indicó, “El trabajo pertenece a la condición originaria del ser humano y forma parte del ‘proyecto Divino’”. “El trabajo es muy importante para la realización del hombre y para el desarrollo de la sociedad”.

El Papa Francisco en el año 2015, le expresa a los miembros de las asociaciones cristianas de trabajadores italianos, “allí donde, a causa de una visión economicista, se piensa en el hombre en clave egoistica y a los demás como medios y no como fines, el trabajo pierde su sentido primario de continuación de la obra de Dios”.

En el año 2017, Su Santidad el Papa Francisco, les dijo a los participantes de la Conferencia Internacional de la “Populorum Progressio a la Laudato Si”; “el trabajo es clave para el desarrollo espiritual. Según la tradición cristiana, éste es más que una simple labor; es, sobre todo, una misión”.